También llamadas genodermatosis. Son un conjunto de enfermedades de origen genético que producen lesiones en la piel y, en consecuencia, también de otros órganos. Están incluidas dentro de las enfermedades raras.
Algunos ejemplos de enfermedades genéticas serían:
- Poroqueratosis: se caracteriza por la aparición de un engrosamiento de la piel en una o varias zonas. Este engrosamiento suele adoptar forma redonda con los bordes más elevados. Tiene una apariencia como la piel de gallina.
- Ictiosis: provoca que la piel se vuelva seca y escamosa (como la de los peces) y puede aparecer un ligero picor. Se puede aliviar, pero no tiene cura.